Actualmente, miles de personas a nivel mundial encuentran grandes dificultades para movilizarse en las calles, edificios, oficinas, locales e inclusive en su casa, por ello, eliminar barreras arquitectónicas, resulta fundamental para cambiar la realidad de quienes sufren de problemas de movilidad o no tienen la posibilidad de desplazarse con seguridad y comodidad.
Las barreras arquitectónicas son aquellos elementos que obstaculizan o interrumpen la movilidad de las personas, es decir, son aquellos obstáculos que impiden el libre acceso o interrumpen la circulación, ocasionando problemas en la comunicación, desarrollo y relaciones.
Por ello, la solución a estos problemas es eliminar las barreras, para así garantizar la correcta integración de los ciudadanos, lo que permitirá mejorar la calidad de vida. Hoy en día es fundamental, para disfrutar de la inclusión y los avances de la sociedad.
Búsqueda de la accesibilidad
Disfrutar de la accesibilidad, permite a todas las personas utilizar todos y cada uno de los espacios de forma autónoma y segura, logrando así que se sienta parte de la sociedad y se integre sin limitantes y negativas.
Un espacio, lugar o instalación, se considera accesible, cuando se ajusta a los requerimientos y necesidades que garantiza la comodidad, confort y tranquilidad de los usuarios de movilidad reducida o mayores.
Esta, se convierte en un factor clave para lograr la inclusión social al 100%, lo que ofrecerá una accesibilidad total, lo que permitirá crear una sociedad equitativa, independiente, consciente e inclusiva, para lograr derribar las barreras y abrir caminos que nos permitan conquistar cada planteamiento. Suprimir estas barreras nos permitirá:
- Mejorar la calidad de vida.
- Otorgar autonomía a las personas.
- Facilitar el acceso y desplazamiento en espacios exteriores e interiores.
- Se logra mayor inclusión y comunicación.
- Mayor alcance y confort.
Tipos de barreras
Existe una amplia variedad de barreras arquitectónicas, que desde pequeños nos han inculcado, las cuales suponen un gran obstáculo para el convivir y desarrollo normal en la comunidad. A continuación, te presentamos tres tipos de barreras, que impiden el desarrollo y movilidad:
- Barreras a nivel urbanístico: estas las ubicamos en espacios públicos, entre las cuales destacan las aceras estrechas, pavimento irregular, desniveles mal ejecutados, señalizaciones mal situadas, y todo aquello que ocasione impedimento para movilizarse a una persona con discapacidad.
- Barreras a nivel estructural: nos referimos a aquellas limitaciones que se desarrollan en espacios públicos o privados. En este caso podemos denotar ausencia de rampas, edificios sin ascensores, accesos solo mediante escaleras y, espacios estrechos.
- Barreras en el transporte público: son aquellas que afectan a los transeuntes del día a día y, hacen su desarrollo, y convivencia una experiencia incomoda y limitante. Nos referimos a estaciones sin ascensor, sin rampas, unidades mal acondicionadas, falta de seguridad.
Por ello y más, existe una necesidad de eliminar esas barreras arquitectónicas que ocasionan un grave desarrollo de la sociedad, a fin de lograr mayor inclusión y confianza al momento de desenvolverse y querer progresar.
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